miércoles, 2 de octubre de 2013
martes, 1 de octubre de 2013
Opinión
El libro indaga en la manía de la gente de creer cosas estrafalarias aunque las pruebas demuestren (o no las haya). Ataca, siempre dentro de un tremendo respeto, a curanderos y a esas personas que echando cuatro huesos en el suelo pretenden adivinar el futuro. Como ejemplo personal, diré, que en la radio hay un programa donde la gente llama y un supuesto vidente te pregunta el nombre (cosa que ya debería saber) y te pide que elijas un color. Con estas simples cosas, no os podéis ni imaginar las cosas que dice a los que llaman. Y lo peor de todo es que la gente lo da por hecho.
El libro también pretende defender la ciencia ante esa idea arraigada en la población mundial de que es una rama herética que sólo pretende negar las religiones. Así, Carl Sagan, nos hace entender que el cometido de la ciencia no es eliminar creencias, sino buscar evidencias de todo tipo. Carl Sagan, dice, que él mismo es el primero que desearía saber que hay y encontrar vida en otra parte del universo, pero la ciencia y la realidad, a día de hoy dice que no la hay.
Por ejemplo, la ciencia ha intentado por todos los medios encontrar una prueba de que el ser humano tiene eso que llamamos "alma". Todos los intentos han sido fallidos. El ser humano simplemente está hecho de materia y energía. Tampoco la ciencia tiene ninguna prueba empírica y satisfactoria de la existencia de los ovnis y mucho menos de Dios.
El libro intenta dar una explicación a muchos de los supuestos avistamientos de ovnis. Un ejemplo ilustrativo, es que los que muchas personas creen que son ovnis, no son más que satélites que se desintegran al caer a la atmósfera terrestre. El científico dice que es tal la cantidad de chatarra que rodea a la Tierra, que todos los días del año, al menos tres artefactos de toda índole caen a la atmósfera terrestre. ¡Tres todos los días!
También da explicaciones claras y concisas a muchos mitos, unos ya desmitificados o todavía en boga. Creencias como que en Marte habían restos de alguna civilización extraterrestre, la creencia de que una vez existió un continente llamado la Atlántida, etcétera, son otros varios temas que el libro explica y nos da una visión esclarecedora.
Por ejemplo, la ciencia ha intentado por todos los medios encontrar una prueba de que el ser humano tiene eso que llamamos "alma". Todos los intentos han sido fallidos. El ser humano simplemente está hecho de materia y energía. Tampoco la ciencia tiene ninguna prueba empírica y satisfactoria de la existencia de los ovnis y mucho menos de Dios.
El libro intenta dar una explicación a muchos de los supuestos avistamientos de ovnis. Un ejemplo ilustrativo, es que los que muchas personas creen que son ovnis, no son más que satélites que se desintegran al caer a la atmósfera terrestre. El científico dice que es tal la cantidad de chatarra que rodea a la Tierra, que todos los días del año, al menos tres artefactos de toda índole caen a la atmósfera terrestre. ¡Tres todos los días!
CAPITULO 25: LOS VERDADEROS PATRIOTAS HACEN PREGUNTAS
La tortura, el hambre y la irresponsabilidad criminal gubernamental son más fáciles de encontrar en gobiernos tiránicos que en gobiernos democráticos, ya que los segundos tienen más probabilidad de ser destituidos del cargo.
Ahora bien es aplicable a la vida política y el entorno el método científico con muy buenos resultados y esto se ha hecho desde ya hacer tiempo incluso cada decisión social que se ha tomado ha sido un experimento social, claro ejemplo son los cambios en la política económica, el tipo de educación impartida e incluso las decisiones o campañas adoptadas por nuestros dirigentes.
No hay ninguna nación en la Tierra que se encuentre en condiciones óptimas para encarar el siglo XXI. Nos enfrentamos a abundantes problemas sutiles y complejos. Por tanto, necesitamos soluciones sutiles y complejas. Por lo tanto implementar la secuencia de prueba y error genera un sinfín de alternativas como experimento científico.
Sin embargo repetimos los mismos errores una y otra vez. Tenemos resortes fácilmente accesibles que liberan poderosas emociones cuando se pulsan. Por lo que podemos ser manipulados hasta el más profundo sinsentido por políticos inteligentes.
Los redactores de la constitución estadounidense fueron lo suficientemente visionarios para darse cuenta que las masas deberían ser las que gobernaran, además de que el poder corrompe y que es mejor renovarse siempre incluyendo las leyes y uno de los puntos mas sensibles la separaciones de los poderes.
Además se tiene que educar a las siguientes generaciones para que no olviden, para que defiendan las libertades que se les han conseguido. Un pueblo sin educación es como masilla en las manos de los políticos influyentes.
Ahora bien es aplicable a la vida política y el entorno el método científico con muy buenos resultados y esto se ha hecho desde ya hacer tiempo incluso cada decisión social que se ha tomado ha sido un experimento social, claro ejemplo son los cambios en la política económica, el tipo de educación impartida e incluso las decisiones o campañas adoptadas por nuestros dirigentes.
No hay ninguna nación en la Tierra que se encuentre en condiciones óptimas para encarar el siglo XXI. Nos enfrentamos a abundantes problemas sutiles y complejos. Por tanto, necesitamos soluciones sutiles y complejas. Por lo tanto implementar la secuencia de prueba y error genera un sinfín de alternativas como experimento científico.
Sin embargo repetimos los mismos errores una y otra vez. Tenemos resortes fácilmente accesibles que liberan poderosas emociones cuando se pulsan. Por lo que podemos ser manipulados hasta el más profundo sinsentido por políticos inteligentes.
Los redactores de la constitución estadounidense fueron lo suficientemente visionarios para darse cuenta que las masas deberían ser las que gobernaran, además de que el poder corrompe y que es mejor renovarse siempre incluyendo las leyes y uno de los puntos mas sensibles la separaciones de los poderes.
Además se tiene que educar a las siguientes generaciones para que no olviden, para que defiendan las libertades que se les han conseguido. Un pueblo sin educación es como masilla en las manos de los políticos influyentes.
CAPITULO 24: CIENCIA Y BRUJERIA
La idea de que la ciencia es un instrumento para promocionar una sociedad de consumo y su enfoque de empresa tiene que cambiar. Se debe entender la ciencia como un método de pensamiento que nos permite conquistar la ignorancia. La ciencia es el medio para realizar un futuro más limpio y lustroso y no la política.
Si este enfoque se hubiese esparcido, principalmente entre los siglos XV y XVII, se habrían evitado tantos crímenes y horribles castigos que se les daba a las “brujas” en la edad media, pues el publico habría desistido de la indiferencia ante estos actos y habrían surgido un gran apoyo en contra de estas legislaciones dadas por el estado. No podemos estar seguros de que el futuro de un pueblo se encuentre siempre en las manos correctas, es por eso que el propósito de los científicos no debe sucumbir a las pasiones humanas y poner especial atención a los nuevos poderes que dispone la ciencia hoy en día, con ética y preocupación por parte de toda la comunidad científica, dando especial atención a la educación publica que debe estar basada fundamentalmente en la importancia de la ciencia y la democracia.
Si este enfoque se hubiese esparcido, principalmente entre los siglos XV y XVII, se habrían evitado tantos crímenes y horribles castigos que se les daba a las “brujas” en la edad media, pues el publico habría desistido de la indiferencia ante estos actos y habrían surgido un gran apoyo en contra de estas legislaciones dadas por el estado. No podemos estar seguros de que el futuro de un pueblo se encuentre siempre en las manos correctas, es por eso que el propósito de los científicos no debe sucumbir a las pasiones humanas y poner especial atención a los nuevos poderes que dispone la ciencia hoy en día, con ética y preocupación por parte de toda la comunidad científica, dando especial atención a la educación publica que debe estar basada fundamentalmente en la importancia de la ciencia y la democracia.
CAPITULO 22: ADICTOS DEL SIGNIFICADO
Este capítulo habla sobre el uso que le damos a los medios de comunicaion y sobre todo la television, ya que por lo regular los programas que se transmiten no tienen nada que ver con la ciencia y solo muestran cosas ficticias, inclusive en las caricauras donde solo se muestran cosas o criaturas imaginarias y que en realidad no dejan una buena enseñanza, que este medio de comunicación podría ser aprovechao de una mejor manera si se transmitieran programas que enseñaran ciencia de verdad y no cosas ficticias o cosas que pretender ser ciencia pero que enrealidad nunca han sido comprobadas . Dice que en algunos lugares los gobiernos han pretendido obligar a las televisoras a transmitir programas sobre ciencia en vez de otros tipo de programas como series animadas pero que esto no ha funcionado ya que las televisoras se han negado a seguir estas reglas o simplemente han recurrido a la corrupcion para no hacer caso de estas reglas.
CAPÍTULO 16 CUANDO LOS CIENTÍFICOS CONOCEN EL PECADO
En una reunión con el presidente Harry S. Truman en la posguerra, J. Robert Oppenheimer, comentó que los científicos tenían las manos manchadas de sangre, que habían conocido el pecado. A veces se castiga a los científicos por hacer el mal y a veces por advertir de los malos usos a que se puede aplicar la ciencia.
No quiero decir con esto la ciencia no tenga responsabilidad por el mal uso de sus descubrimientos. Tiene una responsabilidad profunda y, cuanto más poderosos son sus productos, mayor es su responsabilidad. Como las armas de ataque, las tecnologías nos permiten alterar el entorno global que nos sostiene deberían someterse a la precaución y la prudencia.
Me parece imposible que un ser humano normal colabore sin reparos en un invento así, aun dejando de lado el invierno nuclear. Sea cual fuere su contribución real, se ha descrito a Edward Teller como el «padre» de la bomba de hidrógeno. Se asume que las naciones con armas nucleares son y serán siempre, sin excepción, actores racionales, y que sus líderes nunca se verán afectados por ataques de rabia, venganza y locura. En el siglo de Hitler y Stalin, esta idea parece cuando menos ingenua.
No quiero decir con esto la ciencia no tenga responsabilidad por el mal uso de sus descubrimientos. Tiene una responsabilidad profunda y, cuanto más poderosos son sus productos, mayor es su responsabilidad. Como las armas de ataque, las tecnologías nos permiten alterar el entorno global que nos sostiene deberían someterse a la precaución y la prudencia.
Me parece imposible que un ser humano normal colabore sin reparos en un invento así, aun dejando de lado el invierno nuclear. Sea cual fuere su contribución real, se ha descrito a Edward Teller como el «padre» de la bomba de hidrógeno. Se asume que las naciones con armas nucleares son y serán siempre, sin excepción, actores racionales, y que sus líderes nunca se verán afectados por ataques de rabia, venganza y locura. En el siglo de Hitler y Stalin, esta idea parece cuando menos ingenua.
CAPITULO 14: ANTI-CIENCIA.
En este capitulo Carl Sagan explica cual es la principal característica de la anti-ciencia. La anti-ciencia se puede dar de varias formas, incluso los mismos científicos e investigadores pueden caer en esto. La idea de la anti-ciencia es el ocultar, negar o mal informar a un grupo acerca de un hecho o suceso en cualquier momento de la historia.
La anti-ciencia se podría dar en el caso de que algún historiador realice una investigación acerca de la segunda guerra mundial por decir algo, en el caso de que este encuentre alguna operación fantasma de la cual nunca se supo ningún detalle y este decida no divulgarlo o darlo a conocer al publico, eso es anti-ciencia.
Pero el hecho de que las personas tengan creencias diferentes en el ámbito religioso o pertenezcan a un grupo social distinto, no quiere decir que esto sea señal de anti-ciencia. La ciencia debe ser mas flexible en cuanto a las creencias, debe mostrar respeto por las creencias de las personas y no debe juzgar esta.
Toda persona tiene el derecho de pensar y creer en lo que esta desee, siempre y cuando muestre respeto por los pensamientos de los demás. Así también la ciencia debe mostrar este tipo de respeto.
La anti-ciencia se podría dar en el caso de que algún historiador realice una investigación acerca de la segunda guerra mundial por decir algo, en el caso de que este encuentre alguna operación fantasma de la cual nunca se supo ningún detalle y este decida no divulgarlo o darlo a conocer al publico, eso es anti-ciencia.
Pero el hecho de que las personas tengan creencias diferentes en el ámbito religioso o pertenezcan a un grupo social distinto, no quiere decir que esto sea señal de anti-ciencia. La ciencia debe ser mas flexible en cuanto a las creencias, debe mostrar respeto por las creencias de las personas y no debe juzgar esta.
Toda persona tiene el derecho de pensar y creer en lo que esta desee, siempre y cuando muestre respeto por los pensamientos de los demás. Así también la ciencia debe mostrar este tipo de respeto.
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